En este artículo te contaremos acerca de las implicaciones de la inteligencia emocional en las organizaciones para tener ambientes laborales más estables.

Por: Astrid Guerrero, editora del INCP.

Las organizaciones son mucho más que el concepto, el producto, el servicio, la alta gerencia y la gestión externa que se evidencia, pues en ella conviven todas las personas que hacen posible que la entidad se mantenga a flote. De allí, la importancia del bienestar de cada una de las personas, incluida su inteligencia emocional.

La inteligencia emocional (IE) es la capacidad que nos permite reconocer nuestras propias emociones y las de las demás personas para gestionarlas y adaptarlas en pro de los objetivos. En las organizaciones la IE se trata de la habilidad blanda que deben desarrollar las personas con el fin de adaptarse al entorno laboral y relacionarse en ambientes positivos. Estos son los cuatro elementos fundamentales de la IE:

  • Reconocer: saber cuales son nuestras emociones y las de otras personas.
  • Discernir: poder identificar las emociones, etiquetarlas o entender lo que estamos sintiendo.
  • Utilizar: poder utilizar la información emocional para modificar nuestro comportamiento.
  • Ajustar: adecuar las emociones para adaptarnos a diferentes situaciones y conseguir nuestros objetivos.

Importancia de la IE

La salud emocional de los equipos de trabajo es cada vez más importante para las organizaciones, ya que el cómo se sienten las personas influye en el desarrollo de su trabajo y, por consiguiente, de su profesión. Algunas empresas como Google o Facebook se preocupan por incentivar una cultura de crecimiento de las personas y el desarrollo de distintas habilidades, tales como:

  • Sobrellevar mejor las presiones del día a día.
  • Mejorar la relación con colegas.
  • Gestionar los conflictos.
  • Tomar una actitud positiva frente a las dificultades.
  • Crear un ambiente de energía positiva.

¿Cómo aplicar la inteligencia emocional en el trabajo?

Para aplicar la inteligencia emocional en el lugar de trabajo es importante tomar en cuenta los siguientes aspectos:

  • Autoconciencia para entender las debilidades y fortalezas personales.
  • Autocontrol para manejar aspectos negativos y adaptarse a las diversas situaciones.
  • Motivación para alcanzar metas y actuar con actitud proactiva.
  • Empatía con los demás para fortalecer la comunicación.

Lo personal también influye en lo laboral

La forma como las personas se sienten en su vida personal influye en el desarrollo de sus actividades laborales, por ello es clave tratar de tener una vida equilibrada y, dentro de las organizaciones, los lideres deben procurar ser veedores del bienestar de sus trabajadores. Sin embargo, la responsabilidad no solo recae dentro de las empresas, sino también hay actividades que los colaborades pueden realizar para identificar sus emociones y saberlas gestionar; por ejemplo, se puede llevar un registro personal y profesional de las actividades, objetivos, situaciones y sensaciones, lo cual puede ayudar a generar límites y comunicarlos claramente a los compañeros. Un solo individuo puede tener influencia -positiva o negativa – en todo un equipo. Por ello, lograr equipos de alto rendimiento con comunicación efectiva y buenas dinámicas en las relaciones de trabajo es posible si se gestionan adecuadamente las emociones y sentimientos a través de la inteligencia emocional