El ejercicio contable conlleva una gran carga laboral que, generalmente, es excesiva y puede desencadenar problemas de estrés laboral. El contador debe ser consciente de la existencia de estos riesgos y, además, buscar mecanismos que le ayuden a darles un manejo adecuado.
Por Johana Cano Hoyos, asistente de investigación contable del INCP.
Es innegable que el ejercicio como contador público implica una ardua labor que demanda permanente concentración y manejo eficiente del tiempo, ligados al cumplimiento de fechas y vencimientos que por mandato legal son una camisa de fuerza. También, la imposición de responsabilidades de carácter civil, penal, disciplinario, administrativo y social, que, incluso, pueden conllevar a sanciones y castigos de todo nivel; además de la preparación y presentación de información financiera que, dada su importancia para la compañía, precisa pericia, debido cuidado y atención al detalle, son una responsabilidad enorme sobre los hombros de este profesional, y una presión constante, que puede terminar reflejándose en problemas físicos o mentales que afecten su salud.
En opinión de la contadora pública Tatiana Roncancio, quien lleva 8 años ejerciendo profesionalmente: “El exceso de responsabilidades como informes a diferentes entidades de control, el día a día, el tener que estar actualizado ante tantos cambios y reformas afecta la salud profesional; estrés, síndrome del túnel carpiano, entre otros”.
Para Aura Constanza Mariño Moreno, contadora de Bogotá con más de 14 años de experiencia en la profesión, el trabajo desarrollado en el departamento contable conlleva sedentarismo, estrés, exposición permanente a pantallas para el análisis de datos, todos estos factores que, incluso, la han llevado a padecer gastritis y obesidad.
Por su parte, Juliana Rojas, contadora profesional en ejercicio, dice estar totalmente de acuerdo con que el ejercicio contable afecta la salud del contador, ya que “se está expuesto a altos niveles de estrés, riesgos para las habilidades motoras, problemas de respiración, de circulación y problemas de espalda; además de verse afectados psicológicamente porque el estrés laboral, en muchos casos, influye en el descanso y el tiempo con la familia, conlleva depresión y ansiedad e, inevitablemente, termina afectando el desempeño del empleado”.
En este artículo queremos centrar nuestra atención específicamente en el estrés y abordar formas efectivas para su manejo, a la luz de opiniones expertas. Seguramente, el estrés no es un fenómeno exclusivo de los contables, sin embargo se pretende señalar el hecho de que es una carrera en la que se evidencia en un alto nivel de estrés y afecta su salud y por tanto su productividad en las organizaciones.
¿Qué es el estrés?
Tal como lo explica la Organización Mundial de la Salud (OMS) el estrés se define como “una serie de reacciones fisiológicas que en su conjunto preparan al organismo para la acción” (OMS, 1994).
Para entender cómo el estrés puede impactar negativamente la salud, nos remitimos al sitio web especializado en este tema, “ABC del estrés”:
Desde este punto de vista, el estrés sería una alarma, un estímulo que conduce a la acción, una respuesta necesaria para la supervivencia, respuesta que puede ser coherente con las demandas del entorno, o bien, insuficientes o exageradas.
Cuando esta respuesta natural se da en exceso se produce una sobrecarga de tensión que repercute en el organismo humano y provoca la aparición de enfermedades y anomalías patológicas que impiden el normal desarrollo y funcionamiento del cuerpo humano. Algunos ejemplos son los olvidos (incipientes problemas de memoria), alteraciones en el ánimo, nerviosismo y falta de concentración, en las mujeres puede producir cambios hormonales importantes como dolores en abdominales inferiores, entre otros síntomas.
En el documento titulado La organización del trabajo y el estrés, realizado por el Instituto de trabajo, salud y organizaciones de la Universidad de Nottingham, centro colaborador de la OMS, se considera que el estrés laboral afecta negativamente a la salud psicológica y física de los trabajadores, y a la eficacia de las entidades para las que trabajan.
En este documento se aborda la naturaleza del estrés laboral, sus causas, efectos, estrategias de prevención y los métodos de evaluación y gestión del riesgo. Se define el estrés laboral como “la reacción que puede tener el individuo ante exigencias y presiones laborales que no se ajustan a sus conocimientos y capacidades y que ponen a prueba su capacidad para afrontar la situación”. También, añade que este tipo de estrés puede presentarse cuando el empleado no recibe el apoyo suficiente o cuando no goza de la autonomía suficiente en las labores desarrolladas.
De acuerdo con este estudio, no debe confundirse el estrés con “presión o reto” las cuales son apreciaciones que se hacen para encubrir prácticas gerenciales no recomendables. Por tanto, señala que mantener cierta presión puede ser beneficioso para el trabajador porque lo mantiene alerta y motivado, sin embargo, si se superan los límites razonables, pueden originarse problemas de salud a los empleados, lo que finalmente se verá reflejado en su productividad.
¿Por qué se origina?
Según esta publicación de la OMS, las causas del estrés laboral parten de la mala organización del trabajo, es decir, “el modo en que se definen los puestos y los sistemas de trabajo y la manera en que se gestionan”. Entre las principales causas se señalan las siguientes:
- Definición inadecuada del trabajo, mala gestión o condiciones laborales insatisfactorias que conllevan un exceso de exigencias y presiones o dificultad para controlarlas.
- El empleado no recibe suficiente apoyo de supervisores o colegas.
- Conocimiento y capacidades no se ajustan a las presiones del trabajo.
- Se limita el control que el trabajador tiene sobre su trabajo y forma de realizarlo.
Los siguientes son los peligros señalados por la OMS relacionados con el estrés laboral:
¿Cuáles son sus consecuencias?
A continuación, presentamos algunos de los efectos que puede generar el estrés; sin embargo, tal como lo indica el documento, cada individuo puede sufrir de manera particular uno o más síntomas.
Consecuencias del estrés laboral:
- Estar cada vez más angustiado e irritable.
- Incapacidad de relajarse o concentrarse.
- Dificultad para pensar en forma lógica y tomar decisiones.
- No poder disfrutar de su trabajo.
- Sentirse cansado, deprimido e intranquilo.
- Dificultad para dormir.
- Problemas físicos graves: cardiopatías, trastornos digestivos, tensión arterial elevada, dolor de cabeza, trastorno músculo-esquelético, entre otros.
¿Cómo actuar?
En primer lugar se debe hacer una correcta evaluación del riesgo, es decir, identificar la posibilidad de que el estrés laboral este afectando la salud de los empleados, así como las posibles formas de resolver estos problemas y hacer una revisión de la totalidad del sistema. Para ello, puede ser útil preguntar directamente a los empleados si consideran que el trabajo puede afectar negativamente su salud, además, pedirles que definan los aspectos más positivos y negativos de su trabajo, para saber cuál de ellos le somete a excesiva presión.
Como segunda medida se debe gestionar el riesgo, a partir de los siguientes 5 pasos:
Prevenir estrés laboral
El estrés es un problema que atañe tanto al empleador como al empleado y es necesario tomar medidas desde estos dos frentes. Por un lado, en el lugar de trabajo, junto a la evaluación y gestión del riesgo, también es necesario tomar medidas para prevenirlo, por lo cual, será útil tomar en cuenta las siguientes etapas:
Diestrés
Por su parte, el individuo también debe idear formas o mecanismos que le ayuden a contrarrestar su situación particular de estrés. Por esto, te traemos algunas ideas tomadas del portal especializado “Diestrés”, cuyo nombre significa “control efectivo del estrés”:
- Técnicas deportivas
Este sitio web explica que el ejercicio regular aumenta los niveles de endorfinas y disminuye el de cortisol; adicionalmente, el nivel de concentración alcanzado permite que la mente se despeje y alivia tensiones musculares ocasionadas por el estrés.
- Técnicas de respiración, meditación y relajación
Según esta publicación “9 de cada 10 personas aseguran que al practicarlo consiguen controlar los nervios y la ansiedad generadas por las situaciones cotidianas estresantes”. Explica que la respiración consiente ayuda a lograr una concentración que permite simplemente sentir y dejar de lado los pensamientos que nos preocupan.
- Yoga
Diestrés resalta los beneficios del Yoga, considerado un deporte de origen muy antiguo, el cual combina por un lado diferentes estiramientos y posturas que llevan a fortalecen los músculos y por otro la meditación y respiración, claves a la hora de relajarnos y alejarnos del estrés. Finalmente, asegura que el yoga al estabilizar la mente elimina el sufrimiento; de esta manera es posible dedicarse a la paz interior.